Todos los jugadores de beisbol y softbol, tras los partidos nos gusta reunirnos a tomar algo para comentar las jugadas, errores, aciertos y logros, independiente si somos equipo de diferente, todo esto en un buen ambiente de camarería y hermandad, ya que son muchos lazos comunes que nos une. Después del juego, mantuve una conversación muy a mena, con el Manager responsable de Mets de Tenerife, mi buen amigo Jorge Barroso, y el Presidente y Manager de Volcanes de Tenerife mi estimado amigo y un Ex-Piratas Wilson Morera. La conversación fue muy amena, y ambos dimos nuestras opiniones sobre que era importante en nuestros equipos actuales, y nuestras conclusiones, es que ambos cargos, deben ser diferentes. El presidente debe dirigir el equipo, nombrar una directiva constructiva, es decir que ayude a la buena marcha del club, en los niveles organizativos-deportivos-logísticos y financieros. Solo exclusivamente de esto, y el Manager es la persona responsable de la parte más importante de un equipo, deberá guiar, entrenar, corregir a todos los jugadores para el buen desarrollo deportivo del club, ambos cargos deben ser un tandeen de trabajo, ya que juntos son responsables de la marcha de un club, pero para que ello, todos los jugadores deben poner su grano de cooperación, me refiero no solo en lo deportivo y económicamente, sino también en aportar ideas, comentar, sugerir, opinar, y ser critico pero constructivamente. Ya que a veces es muy bueno ver las cosas desde diferentes puntos de vista.
En definitiva llevar y mantener un equipo es un trabajo constante, duro y arduo, pero también es gratificante cuando uno como presidente, ve a sus amigos animados, alegres de jugar, echarles una mano, escucharles cuando te cuentan algún problema, ser sus confidentes, sobre todo en estos tiempos de crisis y desempleo que afecta a muchos de los nuestros y hacen grandes sacrificios para poder pagar sus cuotas. Creo que entre todos podemos lograr que nuestro deporte este en el sitio que se merece.
El Presidente, el Manager, y todos los miembros de un equipo, deben de apoyarse entre ellos, hacer críticas, como en toda familia, pero siempre buscando entre todos la consolidación del grupo como tal, donde impere el respeto, la disciplina, el honor y la pasión por este deporte que se llama el softball. Todos juntos debemos de llevar al Club a lo más alto de la competición, apoyándonos y ayudándonos a desarrollarnos como deportistas, y el que no comparta estos criterios es mejor que continúe en solitario, decisión que tenemos que respetar todos, pero que no podemos compartir, ya que primero está el Club y luego nuestro individualismo.
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